Ley Hipotecaria Española
Este mes se han celebrado los actos del 150 aniversario de la Ley Hipotecaria Española de 1861, mediante la cual nació la figura del registrador en España.
El acto tuvo lugar en la sede de los Registros de la Propiedad de Madrid y estuvo presidido por el Rey Don Juan Carlos, contando con la presencia de los registradores de la propiedad y mercantiles de España.
Un acto que estuvo marcado por las opiniones dirigidas hacia los cambios que necesita la Ley que en estos días está en boca de todos a raíz de la dación en pago.
La ley ha sufrido a los largo de estos 50 años varias modificaciones y adaptaciones a las necesidades del mercado inmobiliario actual, regulando a día de hoy los siguientes aspectos:
– Registro de la propiedad y títulos sujetos a inscripción.
– La forma y efectos de la inscripción.
– Las anotaciones preventivas.
– La extinción de las inscripciones y anotaciones preventivas.
– Las hipotecas.
– La concordancia entre el registro y la realidad jurídica.
– La rectificación de errores en los asientos.
– La publicidad de los registros.
– La dirección e inspección de los registros.
– La demarcación de los registros y del nombramiento, cualidades y deberes de los registradores.
– Los documentos no inscritos.
– Los recursos contra la calificación.